El uso y la interpretación del concepto de gobernabilidad se divide en tres fases. La primera fase (1975-1980) coincide con una crisis y un cambio del modo de regulación. En efecto, las instituciones internacionales desean regresar a funciones liberales del Estado. En una segunda fase, la gobernabilidad se concibe como una manera de administrar la democracia y el Estado. En otros terminos, sirve para la puesta en marcha del ajuste estructural y una supuesta mejora de las instituciones. Es lo que el ponente llama “gobernabilidad ortodoxa”. Desde el principio de los anos 90 (tercera fase), el concepto de gobernabilidad se abre y se usa con la idea de lograr un nuevo contractualismo, un nuevo contrato social.

Se revela aqui un « uso a la carta » de la gobernabilidad cuando según Saldomando, los modelos de gobernabilidad no son intercambiables. El tipo de gobernabilidad concebido en América Latina esta relacionado con condicionalidad, alianzas especificas al modelo económico, diversidad política y alineamiento, redefinición de la relación Estado-sociedad, papel de las instituciones, papel de la participación. La gobernanza significa condiciones.

En este sentido, el autor invita a la promocion de los intercambios sur-sur, a estudios de caso, a la redaccion de un libro blanco, a un dialogo internacional para lograr una transformación del concepto.