English Français Español

Capítulos

La Consolidación del Poder de Evo Morales

La Consolidación del Poder de Evo Morales

Libro : La legitimad del poder en los países andino-amazónicos

Contenido

Manuel De La Fuente 1

Resumen

El presidente Morales ha logrado consolidar su poder a pesar de una serie de dificultades y enfrentamientos violentos que han ocasionado la muerte a varias personas. De elección en elección su caudal de apoyo se ha amplificado y todo indica que se encamina a una reelección casi segura en el mes de diciembre de este año. Pero ¿a qué se deben estos triunfos electorales? ¿Por qué el presidente está manteniendo altos niveles de popularidad? ¿Qué mecanismos le permitieron derrotar a la oposición regional, particularmente la oposición de la “media luna”?4 Son algunas de las preguntas que trataremos de responder en este artículo.

INTRODUCCION

Bolivia ha logrado suscitar la atención del mundo desde hace varios años. En primer lugar, porque el partido de Evo Morales, el Movimiento al Socialismo (MAS), consiguió un triunfo impresionante en el 2005. El MAS, de ser un pequeño partido regional a fines de los 90 (momentos de su creación), se convirtió en la primera fuerza política del país, logrando en dichas elecciones una mayoría absoluta de sufragios, votación nunca vista en lo que va del reciente periodo democrático.2

En segundo lugar, porque por primera vez un “indígena”,3 Evo Morales, ocupa la Presidencia. Desde siempre el país fue dominado por las élites blancas o mestizas, aunque varios miembros de los pueblos indígenas ocuparon puestos importantes del aparato del Estado, tanto a nivel nacional como local, particularmente desde la revolución nacional de 1952 y con mayor fuerza desde el apertura del proceso de descentralización iniciado con la implementación de la Ley de Participación Popular, en 1994.

En tercer lugar porque Evo Morales y su partido, el Movimiento hacia el socialismo (MAS), proponían hacer la revolución en los marcos de la democracia. Una revolución que debería plantear un modelo de desarrollo diferente al neoliberalismo y favorable a los sectores populares, erradicando la pobreza. Una revolución que eliminaría todo tipo de discriminaciones y exclusiones, y además modificaría las relaciones de poder entre los diferentes grupos étnicos, favoreciendo a los pueblos indígenas del país.

Este programa suscitó el entusiasmo de millones de personas que habitan Bolivia, de muchos de los residentes bolivianos en el extranjero y de los sectores progresistas del planeta. Pero también causó temor entre los grupos dominantes del país que utilizaron todos los mecanismos, jurídicos u otros, para evitar que el cambio perjudique sus intereses. La confrontación entonces se volvió permanente, y la violencia política costó la vida a muchas personas.

Al cabo de casi cuatro años de gobierno del MAS, a pesar de todas las dificultades y enfrentamientos, Evo Morales ha logrado consolidar su poder y se encamina a una reelección casi segura en el mes de diciembre de este año (2009). La legitimidad del presidente Morales viene de su triunfo electoral del 2005, legitimidad que fue ratificada en el referéndum revocatorio del 2008 y en el referéndum sobre la Constitución Política del Estado del 2009. Pero ¿a qué se deben estos triunfos electorales? ¿Por qué el presidente está manteniendo altos niveles de popularidad? ¿Qué mecanismos le permitieron derrotar a la oposición regional, particularmente la oposición de la “media luna” ? Son algunas de las preguntas que trataremos de responder en este artículo.

LAS ELECCIONES DEL 20055

Para entender el triunfo electoral del MAS, primeramente, señalaremos el contexto en el que se da esta victoria. Un contexto marcado por una crisis que tiene varias aristas, tanto en el plano económico como en el político. En lo económico, se puede constatar que el modelo neoliberal implementado en 1985 llegó a su agotamiento a fines de los 90. En esos momentos se produjo una desaceleración en el crecimiento del producto interno bruto (PIB), ocasionando que el ingreso per cápita pase de 1019 dólares en 1997 a 910 en el 2003 (Nueva Economía: 2004). Por otra parte, las desigualdades se incrementaron: en efecto, el Índice de Gini6 pasó de 0,52 de principios de los 90 a 0,61 en el 2002 (Tokarsky: 2005). Además, los niveles de desempleo7 y de pobreza se mantienen elevados. En el 2002, un 64% de la población boliviana era considerada pobre (Landa: 2003).

Pero la crisis no es sólo económica, también es política. Desde 1985 hasta fines de los 90, la “gobernabilidad” estuvo garantizada. Era una época en que se celebraba el modelo boliviano de “democracia pactada”. Modelo que consistía en acuerdos que se producían en el Congreso tanto para elegir al presidente, como para mantener la gobernabilidad. Estas alianzas significaron una cierta estabilidad y modernización del Estado durante muchos años. Pero a fines de los 90, la población se volvió cada vez más crítica de estas alianzas, particularmente a partir de 1997, cuando Banzer, para lograr su elección, conformó la llamada “megacoalición”, un pacto entre varios partidos, que tenían posiciones políticas e ideológicas disímiles. En el 2002 la situación empeoró ya que el acuerdo que consagró Presidente a Gonzalo Sánchez de Lozada se produjo entre dos enemigos acérrimos: el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) y el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR). A la larga estos acuerdos desgastaron la credibilidad de los políticos, ocasionando un mayor descrédito de los partidos políticos tradicionales.

Partidos que son considerados, cada vez más, no como entidades al servicio de la ciudadanía, sino como maquinarias que buscan el beneficio personal de sus militantes. Las prácticas clientelares, corruptas, y el nepotismo reinante durante la época neoliberal han hecho que la población no crea más en los partidos políticos tradicionales.

Otro elemento que contribuye a la crisis política es la consolidación de las fuerzas contestatarias al modelo neoliberal. Los diferentes gobiernos neoliberales, hasta la “Guerra del Agua” de Cochabamba, habían logrado imponer su voluntad, sin mayores sobresaltos. Pero en Abril del 2000, después de la sublevación de la ciudad y campiña cochabambina contra la privatización del agua, Bolivia ya no es la misma, porque por primera vez una población cansada de la corrupción y de los negociados que habían envuelto a las privatizaciones, se movilizó sólida y decididamente, logrando que el gobierno retroceda y que el agua vuelva a manos públicas. La “Guerra del Agua” puso en cuestión no solamente a las privatizaciones sino al modelo económico en su conjunto. También, demostró la debilidad de los partidos políticos tradicionales, incapaces de cumplir con su rol de mediación entre el Estado y la sociedad, contribuyendo de esta manera a ahondar la crisis de su legitimidad.

Posteriormente, otras batallas se sucedieron clamando por el fin del neoliberalismo, pero además esas movilizaciones exigían un mayor reconocimiento a los pueblos indígenas y una mayor atención al sector agrario. Fueron los campesinos e indígenas los principales protagonistas de estos enfrentamientos. En el 2003, la polarización fue in crescendo. Además del antagonismo de los campesinos e indígenas, se comenzó a notar la oposición creciente de los sectores populares de las ciudades y de importantes núcleos de la clase media. Después de los enfrentamientos de Febrero y de Octubre del 2003,8 Sánchez de Lozada, fue obligado a renunciar. Su sucesor Carlos Mesa, tampoco duró mucho tiempo y en Junio del 2005 en medio de una convulsión social, tuvo que dimitir.

El nuevo presidente convocó a elecciones para diciembre del 2005. La derecha trata de reorganizarse detrás de Jorge Quiroga, ex presidente y alto dirigente de Alianza Democrática Nacional, que evita presentarse con la sigla de su anterior partido y organiza una agrupación ciudadana9 llamada Poder Democrático y Social (PODEMOS). Samuel Doria Medina es otro de los candidatos que trata de ocupar el centro, se presenta con la sigla de Unidad Nacional, aunque fue uno de los principales dirigentes del MIR. Estas “nuevas” agrupaciones políticas perdieron las elecciones porque no lograron diferenciarse lo suficiente de lo que representaban los partidos tradicionales, sus campañas fueron poco propositivas, siempre estuvieron a la defensiva y cometieron importantes errores al tratar de infundir de manera burda temor sobre lo catastrófico que sería un gobierno del MAS. Cabe sin embargo matizar esta derrota señalando que en las elecciones prefecturales, los candidatos de la actual oposición lograron ganar en seis de los nueve departamentos del país. Particularmente en los más importantes como La Paz, Santa Cruz y Cochabamba.

Por su parte el MAS aprovechó muy bien el desencanto de gran parte de la población sobre las bondades del modelo neoliberal, de su desafección hacia los partidos de derecha tradicionales y la debacle y desaparición de la izquierda tradicional. Pero estos son factores más externos al MAS. En lo interno, el aprovechamiento que hace esta formación política y el movimiento indígena campesino de la Ley de Participación Popular merece una mención importante. Gracias a esta Ley que crea municipios urbano-rurales con atribuciones y recursos económicos significativos, muchos indígenas y campesinos llegan a ser alcaldes y concejales. Una experiencia en la gestión pública que los fortalece y les da confianza para pensar en la toma del poder central. Claro que para ello es necesaria la existencia de un líder indígena con capacidad de triunfar a nivel nacional. Y ese personaje era Evo Morales, dirigente con gran carisma y proyección nacional e inclusive internacional

Por otra parte, durante la campaña electoral el discurso del MAS logró una notable receptividad. Además, la nacionalización de los hidrocarburos y la convocatoria a la Asamblea Constituyente fueron temas claves en los que el MAS tuvo todas las de ganar, ya que la credibilidad de los otros partidos en estas temáticas era muy baja. Finalmente, hay que subrayar una capacidad de respuesta rápida e inteligente por parte del MAS a la propaganda negativa que hacían sus contrincantes. Es a destacar que después de la toma del poder por parte de Evo Morales, el manejo que hace el gobierno de los medios de comunicación se perfecciona y será una de sus mejores armas.

LA POPULARIDAD CRECIENTE DEL PRESIDENTE MORALES

Una de las primeras medidas adoptadas por el gobierno de Morales fue la “nacionalización de los hidrocarburos” que fue bien recibida por la población boliviana. El presidente Morales llegó al poder, como señalamos más arriba, con un apoyo del 54% de los votantes, simpatía que en momentos que se produce la “nacionalización de los hidrocarburos” (1ro de mayo de 2006), según una encuesta de opinión, alcanza a un 81% (Anuario de La Razón, 14 de diciembre de 2006).

La “nacionalización”10 ha significado, entre otros, la renegociación de los contratos que tenían las empresas petroleras transnacionales con el Estado boliviano. Por otra parte, el gobierno logró aumentar los precios de venta de gas a Brasil y Argentina. Dicha renegociación, así como el aumento de los precios de venta está permitiendo al gobierno contar con mayores ingresos. En efecto, según el CEDLA “la Renta de Hidrocarburos” (impuestos, regalías y otros) en los últimos años ha registrado una tendencia ascendente, mientras en el 2004 por estos conceptos se recaudó $US 567 millones, en el 2007 la recaudación fiscal fue de $US 1.718 millones” (2009).

El gobierno ha utilizando esta renta para implementar el bono “Juancito Pinto” y el bono “Dignidad”: el primero destinado a los niños para que sigan estudiando y el segundo para las personas de la tercera edad. Estas no son las únicas medidas sociales que ha tomado el gobierno. En el campo de la educación se llevó adelante una importante campaña de alfabetización. Asimismo en el campo de la salud, contando con ayuda de Cuba y Venezuela, se construyó centros de salud y se atendió a personas de escasos recursos. Estas medidas y otras están contribuyendo a incrementar la estima que siente la población por el gobierno del MAS.

Volviendo a la “nacionalización de los hidrocarburos” cabe notar que esta medida fue acompañada por todo un discurso nacionalista que no solamente reivindicaba la recuperación principalmente del gas, sino de todos los otros recursos naturales y los servicios básicos. Materializando este discurso se procedió a nacionalizar principalmente el Complejo Metalúrgico Vinto y la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (ENTEL), la más importante del país en dicho rubro. En el primer caso el gobierno indicó que con esta nacionalización se “ratifica el derecho soberano del Estado boliviano a disponer de sus recursos naturales y de sus empresas” y que además se trataría “de una medida soberana que recupera la lucha histórica de los bolivianos por su independencia económica” (Econoticiasbolivia: 2007).

En el caso de ENTEL, el presidente Morales indicó que “con esta nacionalización se está avanzando en lograr que los servicios básicos, sea teléfono, agua o electricidad, “no pueden ser un negocio privado” y llamó a los mandatarios del mundo a que éstos sean considerados “parte de los derechos humanos”. Frente a esta medida el ejecutivo de la Central Obrera Boliviana Montes felicitó a Morales y sus ministros “por los decretos y los cambios” que dan respuesta a “la sangre de 2003, de 2005; estamos viendo la nacionalización de algunas privatizadas y ese era el clamor de nuestros mártires” (La Jornada 2008). Una muestra de apoyo que consideramos es ampliamente respaldada por una mayoría de la población boliviana.

En realidad el hecho que el Estado vuelva a ocupar espacios importantes en el quehacer económico no es solamente bien visto en la actualidad en Bolivia, también lo es en muchos países de América Latina e inclusive en Estados Unidos y Europa, tras la crisis financiera internacional de los últimos meses.

Por otra parte, se crearon varias empresas, como la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (EMAPA), que como su nombre lo indica brinda apoyo a los pequeños productores agrícolas. Pero sobretodo EMAPA permitió al gobierno controlar la inflación vendiendo una serie de alimentos a precios menores a los que regían en el mercado.11 Otra empresa que está ofreciendo un servicio más económico que el sector privado es Boliviana de Aviación (BOA), aerolínea publica de reciente creación. Además, se obligo a las telefónicas y a las empresas de electricidad rebajar sus tarifas, medidas que fueron bien acogidas por la población.

El nacionalismo además se expresa en la denuncia constante de la real o supuesta intervención estadounidense. Desde el inicio de su mandato Evo Morales acusó a Estados Unidos de inmiscuirse en los asuntos del país. Limitó el accionar de USAID y procedió a la expulsión de la DEA y del embajador estadounidense Philip Goldberg. El enfrentarse a Estados Unidos, reivindicar la soberanía nacional y la dignidad de los bolivianos y de la patria son temas que han estado dando créditos al Gobierno de Morales.

Pero el nacionalismo no es el único tema en el que Evo Morales asienta su legitimidad. Otra temática de la que saca provecho es la cuestión indígena. Un día antes de su posesión oficial como presidente de Bolivia, Evo Morales asumió el mando de la República en un “acto inédito por su simbolismo y una masiva asistencia de público”: “recibió la energía de la renacida civilización Tiahuanaco… Como en un viaje atrás en el tiempo, Morales fue bendecido en un llamativo ritual en el que un ‘amauta’ o sacerdote andino lo invistió como máxima autoridad india al entregarle una réplica del bastón de mando tiahuanacota” (Azogue.net: 2006).

Este evento, como señala Laurent Lacroix, “anuncia un trabajo intenso de indianización visual del poder por el nuevo gobierno, que está atento a su imagen ante sus bases y la comunidad internacional”. Además, según el mismo Lacroix, “Hay que reconocer que Evo Morales constituye un producto político atractivo para el mundo”, ya que es presentado como el primer Presidente “indio” de América Latina, y como aquel “que encarna en el imaginario colectivo el final del (neo)colonialismo económico, político y cultural en América Latina” (2009).

Ahora bien, durante su mandato Evo Morales cuando puede utiliza los rituales, particularmente aymaras, ya sea en algún evento especial que se realiza en el Palacio de Gobierno, ya sea cuando se aprueba alguna de las leyes consideradas trascendentales. Este fue el caso de la Ley de Reconducción Comunitaria de la Reforma Agraria. Ley que se promulgó “Ante la presencia de cientos de indígenas y campesinos, que festejaron la promulgación de la ley”. En esa oportunidad “el Primer Mandatario proclamó la revolución agraria y anunció el fin del latifundio en el país, debido a que con el instrumento legal promulgado anoche ‘se iba a acabar con los terratenientes del oriente’” (Los Tiempos, 29/11/2006).

El combate a la “oligarquía” cruceña fue otro de los temas que permitieron apuntalar, en el occidente del país, al Gobierno de Evo Morales. Los datos que presentaremos más adelante demuestran un avance interesante en la votación del MAS en La Paz, Oruro y Potosí.12 Creemos que este apoyo se consolida, además de lo ya dicho anteriormente, por los constantes ataques y movilizaciones que realiza el MAS en contra de la “oligarquía” cruceña. Todo lo que hacía la oposición que no gustara al MAS era porque había una “mano negra”, que si no era la intromisión estadounidense, pues era la de los grupos y logias de poder cruceños.

El focalizar a un “enemigo” permitió al Gobierno mantener a sus bases sociales continuamente movilizadas y evitar que las críticas que provenían de sectores más radicales (como por ejemplo contra la “falsa nacionalización” de los hidrocarburos) no tenga el menor impacto de desgaste del gobierno de Morales. También impidió a muchos denunciar la corrupción y las constantes violaciones al Estado de derecho que cometía el gobierno. El haberlo hecho significaba ponerse del lado de “los reaccionarios cruceños”. La polarización resultante de los constantes enfrentamientos entre el gobierno y la oposición fue muy bien aprovechada por el gobierno.

La polarización además evitó que las críticas en contra de Evo Morales por la inoperancia de las políticas públicas tengan algún impacto. Por ejemplo, a pesar de la bonanza económica de los últimos años y a pesar de la política social del gobierno y de los bonos, datos de la Unidad de Políticas Económicas y Sociales del Gobierno revelan que el número total de pobres ha crecido. En el 2005, los pobres eran “un poco más de 5,6 millones, mientras que el bienio 2007-2008 la cifra ya rondaba por los 6 millones” (Econoticiasbolivia: 2009).

LA “MEDIA LUNA” DERROTADA

Otro de los logros de Evo Morales fue la instalación de la Asamblea Constituyente en Agosto del 2006. Sin embargo, al cabo de unos meses, este escenario complicó el accionar del gobierno. El MAS, al no querer aceptar que el nuevo texto constitucional sea aprobado por dos tercios de los constituyentes, permitió el resurgimiento de la oposición. Ésta organizó huelgas de hambre y movilizaciones en todo el país en defensa de los dos tercios. En los departamentos del Oriente y en Tarija las concentraciones de ciudadanos fueron masivas, llegando a casi un millón de personas.

En esta reorganización, un tema que permite una mayor cohesión y capacidad de movilización de la oposición fue lo referente a las autonomías departamentales. Recordemos que el NO a las autonomías ganó a nivel nacional y en 5 de los 9 departamentos de Bolivia, pero el SI ganó con un amplio margen en el Oriente y en Tarija (ver cuadro No.1). Fuertes de ese apoyo, la posición se atrincheró en los departamentos de la llamada “media luna”.

Cuadro Nº 1

Apoyo a Evo Morales en las últimas contiendas electorales

(Según departamentos y en porcentajes)

  
DepartamentosElecciones generales 2005Referéndum autonómico 2006(1)Referéndum revocatorio 2008(2)Referéndum constituyente 2009(3)Diferencia entre el 2005 y el 2009
LA PAZ66,673,483,378,1+11,5
ORURO62,673,183,073,7+11,1
POTOSI57,875,584,980,1+22,3
COCHABAMBA64,863,070,964,9+0,1
CHUQUISACA54,262,253,951,5-2,7
TARIJA31,639,249,843,3+11,7
SANTA CRUZ33,228,940,834,8+1,6
BENI16,526,243,732,7+16,2
PANDO20,942,352,541,0+20,1
TOTAL BOLIVIA53,757,667,461,4+7,7

Fuente: Corte Nacional Electoral. Elaboración personal.

(1): Porcentaje de la población que votó, siguiendo la consigna del MAS, por el NO a las autonomías departamentales.

(2): Porcentaje de la población que votó por la continuidad de Evo Morales en la presidencia de Bolivia.

(3): Porcentaje de la población que respalda a la nueva CPE.

Ahora bien, volviendo al accionar de la Asamblea Constituyente (AC), al llegar a un acuerdo sobre los dos tercios reinició su trabajo. Pero ahí surgió otro problema, que tuvo que ver con el pedido de las principales instituciones de Sucre de que todos los poderes del Estado vuelvan a esa ciudad. Este pedido de “capitalía” plena entrabó las deliberaciones de la AC y el MAS, para evitar el fracaso de la Asamblea, decidió aprobar la nueva Constitución Política del Estado (CPE) “en grande” en un cuartel militar a las afueras de la ciudad de Sucre,13 y aprobar la CPE “en detalle” en la ciudad de Oruro.

El grueso de la oposición por su parte no participó en dichas deliberaciones por lo que no reconoció ni la legalidad ni la legitimidad de la nueva CPE. Además, los sectores autonomistas de los departamentos del Oriente del país y de Tarija, sin ya importarles mucho el contenido de la CPE aprobada en Oruro, procedieron a redactar y aprobar los estatutos autonómicos que regirían el destino de 4 de los 9 departamentos del país. Además, iniciaron una campaña de recolección de firmas para demandar un referéndum departamental. Campaña que fue exitosa y en mayo y junio del 2008 se realizaron sendos referéndums en dichos departamentos, en los que el SI a los Estatutos fue masivo.

Este fue el momento más alto de la oposición y de menor crédito para el gobierno. Sin embargo, inesperadamente, el Senado controlado por la oposición le entregó “una tabla de salvación” al aprobar una propuesta de Ley del MAS que convocaba un referéndum revocatorio. Referéndum que se desarrolló en agosto del 2008 y que fue coronado por un éxito rotundo para el presidente Evo Morales, quien fue ratificado en su puesto por más del 67% de la población. Notándose un incremento notable de su aceptación inclusive en la “media luna” (ver nuevamente el cuadro Nº 1).

Septiembre de 2008 fue el principio de la debacle de la oposición, cuando dejando la legalidad democrática, los grupos más radicales de la oposición se lanzaron a una toma desesperada de las instituciones del poder central que funcionaban en los departamentos de la media luna. El Gobierno respondió movilizando al ejército y a la policía. Además convocó a sus seguidores, a que retomen las instituciones públicas gubernamentales. Estas tomas acabaron en un enfrentamiento sangriento en Pando, en la devolución de las instituciones gubernamentales, y en el inicio del diálogo entre el Gobierno y los prefectos opositores. Este diálogo evitó el enfrentamiento entre miles de masistas, campesinos e indígenas que marchaban hacia Santa Cruz y la población de esa ciudad que se proponía no dejarlos ingresar. Afortunadamente, los sectores sociales afines al Gobierno decidieron levantar el cerco a Santa Cruz el 24 de septiembre, evitando de esta manera un derramamiento de sangre que hubiera sido aún mayor que el de Pando.

A la oposición no le quedó más que aceptar que se lleve adelante un nuevo referéndum sobre un flamante texto constitucional. Flamante ya que un grupo muy reducido de personas pertenecientes al MAS y a los partidos de la oposición se dieron a la tarea de modificar casi 300 artículos de los 400 que contenía la propuesta de la llamada Constitución del MAS, que como dijimos anteriormente fue aprobada en Oruro. Estas modificaciones ya no volvieron a manos de los constituyentes (únicos, según la ley, con capacidad de modificar la CPE) sino que fueron ratificadas por el Congreso que en los hechos se convirtió en un Congreso Constituyente.

En enero de este año la nueva CPE fue aprobada en un referéndum por más del 61% de la población como muestra el cuadro Nº 1. Sin embargo fue rechazada por la mayoría de los pobladores de la “media luna”, lo que muestra que la oposición aunque debilitada mantiene un caudal importante de votantes.

Para cerrar este punto cabe notar que el fuerte de la oposición, que sin duda se encuentra en Santa Cruz, ha sido afectado a principios de este año por el caso del “descubrimiento” de un grupo terrorista liderado por Eduardo Rózsa. Un caso todavía oscuro, puesto que las investigaciones están en curso. Pero “independientemente de si se trató de un grupo secesionista que buscaba dividir el país, como lo señala el gobierno, o de un anzuelo destinado a hacer tropezar y contaminar a los dirigentes opositores de Santa Cruz, como desde aquí varias voces plantean (¿acaso pudo ser ambas cosas?), el efecto Rózsa fue desastroso para el polo que tenía su epicentro en Santa Cruz” (Pulso del 1ero al 7 de noviembre del 2009).

CONCLUSIONES

Evo Morales accede al gobierno en momentos que los partidos políticos tradicionales están en franca declinación y cuando el modelo neoliberal está en crisis. El presidente Morales logra afianzarse en el poder continuando sus críticas contra los partidos y planteando alternativas al neoliberalismo. Su gobierno presenta luces y sombras. Luces que tienen que ver principalmente con las nacionalizaciones, con un renovado intervencionismo del Estado, con las políticas sociales implementadas y con los avances de los pueblos indígenas. En cuanto a las sombras, se relacionan principalmente con la inoperancia de los ministerios y empresas públicas, con el desmantelamiento de ciertas instituciones (como por ejemplo el aparato judicial, habiendo ocasionado la renuncia de todos los miembros del tribunal constitucional y de otras reparticiones del poder judicial), y con el manejo arbitrario y a veces oscuro del poder, como en el caso de Pando y del terrorismo de Rózsa.

Las luces son amplificadas por un aparato de publicidad impresionante con el que cuenta el Gobierno. A su disposición están los medios oficiales del Estado y una red importante de radios comunitarias, populares e indígenas. Los fondos de los que dispone el Gobierno para publicitar las obras y actuaciones de Evo Morales parecen no tener límites. Las sombras son minimizadas y cuando la oposición tiene posibilidades de sacar provecho de algún error del gobierno, su capacidad de convencimiento es contrarrestada por el aparato comunicacional del gobierno que es de una eficacia impresionante, sin parangón en la historia del país.

Con seguridad la consolidación del poder de Evo Morales pasa por un manejo a su favor de los medios de comunicación, pero también por la capacidad que tiene para cambiar de posición y si necesario convertirse en el abanderado de causas a las que se oponía, como es el caso de las autonomías departamentales.

Y ahora que se acercan las elecciones, el presidente Morales está tratando de darse una imagen más conciliadora y cercana de las clases medias e incluso de los sectores empresariales. Está presentando un programa menos confrontacional y más al estilo de los partidos centristas, que seguían las propuestas desarrollistas de la CEPAL de los años 70. ¿Será que esta reconversión será permanente y que el nuevo periodo de Gobierno de Evo Morales se desarrollara en tranquilidad? Sólo el tiempo lo dirá.

Siglas

AC: Asamblea Constituyente

CEDLA: Centro de Estudios Laborales y Agrarios

CEPAL: Comisión Económica para América Latina

CPE: Constitución Política del Estado

EMAPA: Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos

MAS: Movimiento al Socialismo

MIR: Movimiento de Izquierda Revolucionaria

MNR: Movimiento Nacionalista Revolucionario

PODEMOS: Poder Democrático y Social

UN: Unidad Nacional

UNASUR: Unión de Naciones Sudamericanas

Notas

1 Profesor de la Universidad Mayor de San Simón e Investigador del Centro de Estudios Superiores Universitarios (CESU-UMSS). Email: mdelafuente@hotmail.com

2 El MAS, en las elecciones de Diciembre del 2005, logró casi el 54% de los sufragios, 20 puntos por encima de lo que consiguió la Unidad Democrática y Popular con Siles Suazo, en 1980, o el Movimiento Nacionalista Revolucionario con Sánchez de Lozada y Víctor Hugo Cárdenas, en 1993. Esas fueron las mejores votaciones que obtuvieron los partidos y alianzas políticas; generalmente estos obtenían menos de un 25% de los votos.

3 Evo Morales empieza a reivindicar su origen indígena recién a partir de su triunfo electoral del 2005. Notemos además que en Bolivia se está dando un debate sobre la condición indígena. Según el Censo del 2001, 62% de la población sería indígena. Sin embargo, cuando se introduce la categoría mestizo, que faltaba en el Censo del 2001, sólo un 19% de los encuestados en el 2006 se auto-identifican como indígenas, mientras que el 65% de la población opta por la identidad mestiza. Lo que cambia por completo el cuadro de pertenecía étnica en Bolivia (Zuazo: 2006).

4 En las elecciones de 2005, el MAS fue derrotado en cuatro de los nueve departamentos que conforman Bolivia. Esos departamentos (Santa Cruz, Tarija, Beni y Pando) cuyos prefectos son de la oposición fue llamada la “media luna”.

5 En esta parte retomamos partes de un análisis más detallado que presentamos en De La Fuente: 2009.

6 El Índice de Gini muestra la concentración de la riqueza. Su valor se sitúa entre uno y cero. Cuanto más próximo a uno mayor será la concentración de la riqueza; cuanto más próximo a cero, más equitativa es la distribución de la renta de un país.

7 El desempleo a nivel urbano, a mediados de los noventa se encontraba en menos del 4%, mientras que, en el 2003 llegó a un 14% de la fuerza laboral (CEDLA: 2005).

8 En Febrero del 2003 el gobierno trató, sin éxito, de aumentar los impuestos, ya que la población se opuso. Situación que se complicó por el rechazo que tuvo esta medida en el seno de la policía, que se enfrentó con el ejército, dejando un saldo de una decena de muertos y numerosos heridos. En Octubre los enfrentamientos fueron aún más graves y se produjeron, entre otros, porque el gobierno pretendía exportar el gas a Norteamérica a través de Chile. Ver VV.AA: 2004 a y b.

9 Hasta el 2004, solamente los partidos políticos podían presentar candidatos a las elecciones, pero después de la reforma parcial de la Constitución Política del Estado, se rompe este monopolio partidario y se permite a las agrupaciones ciudadanas y a los pueblos indígenas poder terciar en los sufragios. Ver VV.AA. (2004 c).

10 No es una nacionalización clásica ya que el Gobierno quiere mantener una asociación con las empresas petroleras extranjeras, pero controlando el 51% de las acciones de las empresas que operan en Bolivia.

11 Esta no fue la única medida para combatir la inflación. También el Gobierno impuso barreras a la exportación. Lo que obligó a los grandes productores bajar los precios internos de sus productos. Volveremos más adelante sobre esta batalla entre el Gobierno y los sectores privados, particularmente de Santa Cruz.

12 Los avances son más limitados en Santa Cruz, debido a los constantes ataques a ese departamento. En Cochabamba, el apoyo a Evo Morales conoce un estancamiento, sin duda debido a los enfrentamientos del 11 de enero del 2007 (ver Marinkovic: 2009). Finalmente en Chuquisaca el MAS conoce un retroceso en razón de su rechazo a que todos los poderes vuelvan a Sucre. Volveremos sobre este tema.

13 El hecho de haber elegido un cuartel militar enfureció a gran parte de los habitantes de Sucre, quienes trataron de evitar por la fuerza que las deliberaciones de la Asamblea se realicen. Esto ocasionó confrontaciones con la policía, dejando un saldo de dos muertos y un centenar de heridos. Después de estos enfrentamientos los Constituyentes del MAS y la misma policía tuvieron que escapar de Sucre.

Bibliografía

Azogue.net (2006) Morales recibió la energía de las deidades como máximo jefe indígena. www.azogue.net/NOTI2006/internacional/Bolivia/Evo.php

CEDLA (2009): La Renta de Hidrocarburos en las Finanzas Prefecturales (1997-2007). Estadísticas Fiscales, por Juan Luís Espada y Luís Alvarado (Serie Transparencia Fiscal) La Paz: CEDLA, Julio de 2009, 358 p. www.cedla.org/system/files/TENDENCIAS%20Dossier_pdf.pdf

CEDLA (2005): “Economía Boliviana. Evaluación y tendencias”, presentación en power point, www.cedla.org/pub/lista_especif.php?tipo_pubfree=10

Corte Nacional Electoral (varios años): Resultados electorales, www.cne.org.bo/

De La Fuente, Manuel (2009): “Bolivia. ¿inicio de una nueva institucionalidad o retorno de los conflictos sociales?” en Santander, Carlos Los desafíos de la democracia y elecciones en América Latina. Lima: Ara Editores.

Econoticiasbolivia (2007): El Decreto de nacionalización de Vinto : www.econoticiasbolivia.com/documentos/notadeldia/minelucha30.html

Econoticiasbolivia (2009): Cada hora hay 15 nuevos pobres en Bolivia www.econoticiasbolivia.com/documentos/notadeldia/pobres15.html

Jornada (2008): Nacionaliza Bolivia la telefónica Entel y recupera control de los hidrocarburos. www.jornada.unam.mx/2008/05/02/index.php?section=economia&article=022n1eco

Lacroix, Laurent “De la descentralización participativa a la nueva Constitución Política del Estado.Etnicización de las relaciones sociales y políticas en Bolivia” a publicarse en Descentralización, derechos humanos y ciudadanía La Paz, CESU UMSS y PLURAL.

Landa, Fernando (2003): Pobreza y distribución del ingreso en Bolivia. Entre 1999 y 2002, UDAPE, www.udape.gov.bo

Nueva Economía (2004): Once años. Once indicadores, Separata aniversario de los once años de la revista Nueva Economía, La Paz,

Marinkovic, Vesna (2009): Memoria de un conflicto urbano: el dilema autonómico y la prensa en la crisis del 11 de enero de 2007, Santa Cruz: El País

Tokarsky, Irene (2005): “La EBRP como instrumento de lucha contra la pobreza” en ¿Fin de la deuda o deuda sin fin? Un análisis de la iniciativa HIPC y la EBRP en Bolivia, La Paz: Fundación Jubileo, pp. 48 a 59.

UNASUR (2008): Informe de la Comisión de UNASUR sobre los sucesos de Pando. Hacia un alba de justicia para Bolivia.

www.observatorioddhh.org/index.php?option=com_content&task=view&id=109&Itemid=65

VV.AA. (2004 a): Artículo Primero, Revista de Debate Social y Jurídico, CEJIS, Santa Cruz, Año VIII, Nº 16, Abril.

VV.AA. (2004 b): Decursos, Revista de Ciencias Sociales, CESU-UMSS, Cochabamba, Año VI, Nº 11, Mayo.

VV.AA. (2004 c): Opiniones y Análisis, FUNDEMOS, La Paz, No. 71, octubre

ZUAZO, Moira (2006): “Q’ueste los mestizos. Dialogo con tres estudios sobre mestizaje y condición indígena en Bolivia” en Tinkazos, La Paz, año 9, Nº 21, pp. 63 a 72.